El alto consumo de Coca-Cola en la región se debe a una laxa regulación y a la falta de acceso al agua potable.
Por Redacción| Foto Cuartoscuro| La Razón |agosto 21, 2022 | 16:55 pm hrs. Coca-Cola ha generado importantes impactos medioambientales en México en lo que respecta a su voraz consumo de agua pero también en cuanto a la salud de sus pobladores, y es que su consumo en Chiapas, la región del mundo donde más se ingiere, está relacionado con la alta prevalencia de diabetes mellitus.
De acuerdo con un estudio del Centro de Investigaciones Multidisciplinarias sobre Chiapas y la Frontera Sur (CIMSUR) publicado en 2019, cada habitante de Chiapas bebe 821.25 litros de refresco por año, mientras que 160 litros es el consumo per cápita en todo el país.
Causas del alto consumo de Coca-Cola en Chiapas
El encargado de la investigación, el doctor en antropología social Jaime Page Pliego, señala como causas del aumento en el consumo de bebidas azucaradas en la región del sureste a la laxa legislación hacia las empresas refresqueras, las campañas de mercadotecnia en lenguas locales y la poca accesibilidad de agua potable de calidad y en cantidad suficiente para los habitantes.
El especialista también explica este aumento por la modificación de la vida social y religiosa de sus habitantes.
Según expone un artículo de la Alianza por la salud alimentaria, los líderes religiosos tradicionales de la zona comenzaron a sustituir el aguardiente de caña (pox) por refrescos durante sus prácticas rituales, estableciendo concesiones con la compañía Coca-Cola o PepsiCo que estaban incursionando en los mercados indígenas durante la década de 1980.
Estos factores han provocado que los hogares de Chiapas destinen el mayor porcentaje de su ingreso en alimentos y bebidas no alcohólicas, el cual corresponde al 38.4 por ciento, según datos de la Encuesta Nacional de Gasto (Engasto) 2012.
“Chiapas es un ejemplo de cómo las refresqueras han permeado en la cultura, la religión, la política y la sociedad, ocasionando el desplazamiento de otras bebidas. Es en este estado en donde las refresqueras han lanzado las prácticas comerciales más agresivas y en donde han logrado sus mayores ventas”, sentenció el director de la asociación civil El poder del Consumidor, Alejandro Calvillo, durante un encuentro en San Juan Chamula.
Ante esta situación, la Alianza por la salud alimentaria recomienda algunas soluciones como asegurar agua de buena calidad para todas las comunidades, aumentar el gravamen a las bebidas azucaradas, regular las campañas de comercialización, así como incluir un etiquetado adecuado en los productos.
Coca-Cola se bebe el agua de México
De acuerdo con el estudio “En México no falta agua, sobra chatarra”, una de las industrias que tiene mayor impacto ambiental es la refresquera, pues la empresa de bebidas procesadas que más consume agua en el país es Coca-Cola.
Esta refresquera extrae al año 55 mil millones de litros de agua y, para producir tan solo medio litro de refresco, necesita 34.5 litros, es decir, requiere 69 litros para elaborar 1000 mililitros de esta bebida.
Además, la empresa consume líquido en cada una de las 32 entidades del país, incluso en algunas zonas con alto estrés hídrico como Toluca.
Según la investigación, la cifra de consumo de agua podría ser mayor, ya que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) “no supervisa rigurosamente” la extracción del líquido de las concesiones otorgadas.